¡Todo el saber hacer de France Tourisme, para redescubrir la magia de París al mejor precio!
No sé tú, pero para mí, París de noche tiene algo... diferente. No es solo que las luces la hagan más bonita (aunque eso también), es más bien una especie de magia que aparece cuando el sol se va y la ciudad empieza a brillar de otra manera. Y claro, hay mil formas de vivir esa magia. Aquí van algunas que, al menos a mí, me han funcionado bastante bien.
Crucero por el Sena: la elegancia parisina flotando
Empezamos por un clásico, sí. Pero uno que nunca decepciona: un paseo por el Sena al atardecer o ya de noche. Es difícil de explicar, pero ver la Torre Eiffel iluminada desde el agua, sin el ruido de los coches ni el bullicio de la ciudad... tiene algo casi poético.
Puede ser un plan romántico, sí, pero también funciona con amigos o incluso solo, si te apetece una experiencia más introspectiva. Yo lo hice una vez después de un día agotador y salí con la cabeza despejada y el corazón un poco más lleno.
Crucero con cena: cuando todo encaja
Si quieres subir el nivel —o simplemente darte un gusto—, elige un crucero con cena gourmet. No es barato, aviso, pero si buscas una noche especial (un aniversario, por ejemplo), vale cada euro.
Platos bien cuidados, copita de champán, luces reflejadas en el agua... y tú, navegando entre monumentos. A mí me tocó con música en directo, y sinceramente, me sentí en una peli francesa. De las buenas.
Crucero con aperitivo: más relajado, pero con encanto
¿Menos protocolo? Entonces elige el plan de aperitivo a bordo. Ideal con amigos, con tu pareja, o incluso como afterwork parisino si estás de paso por la ciudad por trabajo.
Una copa, algunos canapés, buena música y ese ritmo lento del Sena... Es de esos planes que no necesitan mucho más para ser memorables.
Crucero comentado: para los que quieren saber más
Si eres de los que disfrutan con los datos curiosos, los cruceros guiados te van a encantar. Algunos tienen guías en vivo, otros audioguías multilingües —y en ambos casos, uno se entera de cosas que ni te imaginabas.
¿Sabías que la Conciergerie fue una prisión durante la Revolución? Yo tampoco, hasta que lo escuché allí. Historia, arquitectura, anécdotas... es aprender, pero sin dejar de disfrutar.
Cena en restaurantes con alma parisina
La comida en París... bueno, eso da para otra guía entera. Pero si hablamos de noches inolvidables, aquí van tres tipos de sitios que nunca fallan:
• Café Louise: acogedor, elegante sin ser pretencioso. Ideal para una velada tranquila pero especial.
• Restaurantes con estrella Michelin: claro, aquí estamos hablando de otro nivel. Pero para una vez en la vida (o para celebraciones importantes)... por qué no.
• Brasseries históricas como Le Procope: no solo se come bien, también respiras historia. Dicen que Rousseau y Voltaire eran clientes habituales. Casi nada.
Cabarés y espectáculos: París como en tus sueños
Sé que puede sonar turístico. Pero créeme, un cabaré en París bien hecho es pura fantasía. Si entras con la actitud correcta, es una experiencia que se te queda grabada.
• Moulin Rouge: el más icónico. Plumas, luces, energía desbordante.
• Crazy Horse: más artístico, sensual, sofisticado. Para los que buscan algo diferente.
• Ópera Garnier: si prefieres algo clásico, este sitio es una joya. Solo entrar ya impresiona.
¿Y para moverse? Si no quieres complicaciones, mejor reserva un traslado privado en París. De verdad, no hay nada peor que terminar una noche increíble esperando un taxi bajo la lluvia.
Bares, rooftops y clubes: para los que no se rinden
¿Tienes ganas de seguir la fiesta? París tiene propuestas para todos los estilos nocturnos. Desde sitios elegantes hasta clubes donde la noche se alarga hasta el amanecer.
• Rooftops como Le Perchoir: vistas increíbles, ambiente relajado.
• Bares de cócteles como Little Red Door: creatividad y buen gusto en cada trago.
• Clubs míticos: si te apetece bailar, el Rex Club o Le Duplex nunca fallan.
¿Vas en grupo? Piensa en alquilar un minibus o un coche con chófer. Os ahorraréis más de una complicación.
Transporte privado para grupos
Ya sea un cumpleaños, una despedida, o simplemente una noche especial con amigos, contar con un transporte cómodo y organizado te da tranquilidad. France Tourisme tiene opciones para todos los tamaños de grupo —conductor incluido, claro— y te olvidas de todo lo demás.
Actividades culturales (y paseos sin rumbo)
Porque no todo en París de noche es fiesta. También hay planes más tranquilos, pero igual de memorables.
• Museos de noche: algunos como el Louvre o el Musée d'Orsay abren hasta tarde. Ver arte sin multitudes... es otro rollo.
• Conciertos de música clásica: lugares como La Sainte-Chapelle te envuelven en una atmósfera mágica. Literal.
• Exposiciones temporales: si te gusta el arte contemporáneo, siempre hay algo interesante por descubrir.
Y si no sabes qué hacer… sal a caminar.
• Por las orillas del Sena, sin rumbo.
• Por las calles de Montmartre, donde siempre hay algo que mirar.
• O quédate frente a la Torre Eiffel cuando empieza a brillar. Te prometo que emociona cada vez.